Tuesday, March 8, 2011

La chica más paranoica del mundo

Hola. Soy la chica más paranoica del mundo.


Lo sé porque mi mamá me lo ha dicho, mi novio me lo ha dicho, mis hermanos me lo han dicho, mis amigos me lo han dicho y… bueno, prácticamente todos los que me han conocido el tiempo suficiente como para inferir una opinión sobre mi –que, yo considero, son 5 minutos- lo han dicho:


- Yissss, eres la chica más paranoica del mundo!.- dicen.


Me importa lo que los demás puedan decir, porque puede ser cierto. Como aquel niño ciego que dijo que podía temblar en cualquier momento a partir de la tarde en que empezó a circular su profecía por Internet. Me aterra la idea de que un niño ciego pueda poner a circular sus ideas por Internet, porque para hacer uso de la computadora se necesita ver el monitor, y si alguien que no ve pudiera de pronto ver el monitor, querría decir que lo imposible ha comenzado a suceder.


La película que más detesto en la vida es El Día después de Mañana, porque evidencias expuestas por Al Gore sugieren que podría llegar a ocurrir. Por eso me gusta estar bien informada sobre lo que es posible y lo que no lo es: porque de esa manera puedo saber cuando me están queriendo tomar el pelo en el cine. Desafortunadamente, el 90% de las películas que se exhiben en todas las salas del mundo tienen altas probabilidades de suceder…. el 10% restante corresponde a las comedias románticas, razón por la cual es mi género favorito.


Mis amigos dicen que si existiera un método eficaz, cuantificable y objetivo para medir la paranoia, ganaría el segundo record Guinness para mi pueblo (después del Taco más grande); que si existiera un premio Nobel de la paranoia, habría sido millonaria desde hace mucho tiempo; y que si cualquier fotoperiodista me sacara una foto, ganaría el Premio Pulitzer por capturar la paranoia en su estado más crudo…. Dios sabe que más dirán a mis espaldas… no creo que nada más de lo que estoy describiendo, porque me quieren mucho, y nunca me harían daño. Al contrario, considero a mis amigos como una especie de escolta personal que me sigue a todas partes, y que me hacen sentir siempre segura.


Ésa es la mayor ventaja de ser la chica más paranoica del mundo: que mis seres queridos me saben la chica más paranoica del mundo y por ello jamás me dejarán sola.

En resumen, me gusta como soy, y mientras no existan carteles de “qué hacer en caso de avistamiento extraterrestre”; mientras sospeche que el gobierno oculta información sobre un proyecto de provocación de terremotos para activar la economía; mientras tantos peligros sigan siendo ignorados por la sociedad dada su apariencia indefensa o imposible, seguiré existiendo yo… la chica más paranoica del mundo.